¿Cómo es la vida de un niño implantado? ¿Qué puede hacer y qué no? ¿Puede un niño implantado practicar deportes? Las respuestas a estas preguntas están en la historia de Albin.
Albin tiene 12 años. Vive en Suecia, “al norte de Estocolmo”, dice. Es rubio, como suelen ser los suecos. De piel clara y luce un corte de cabello que lo hace lucir como un pequeño vikingo: una trenza que va de la coronilla a la nuca, con un corte al rape alrededor. Es, pues, un niño noruego como pueden serlo cualquiera de los niños de su edad que habitan este país.¹
Pero hay un detalle que lo diferencia de otros: Albin tiene microtia/atresia, una condición en la cual el oído externo no se formó correctamente y puede terminar afectando el oído medio, impidiendo que el sonido llegue correctamente al nervio auditivo.
Es decir, la microtia/atresia es una de las causas de la hipoacusia conductiva, para la que existe un tratamiento: los implantes de conducción ósea o implantes acústicos. Albin usa uno de estos implantes.
La primera solución que recibió Albin para tratar su pérdida auditiva fue un implante con un procesador de sonido Baha® Power, que le da a las personas que lo usan la capacidad de escuchar con mayor calidad los sonidos que lo rodean. Albin lo sabe. Lo usó durante años. “Creo que tener un sistema Baha desde que era un bebé ha hecho que mi infancia sea bastante normal”, dice él. No hubo exclusión ni se vio enfrentado a la imposibilidad de participar en otras actividades con niños de su edad.
Del Baha al CochlearTM Sistema Osia®
Albin pelea. Y no es en sentido figurado: le gusta entrenar artes marciales, kickboxing y jiu-jitsu. Patadas, puños, defensa, ataque. El implante y el procesador no han sido un impedimento para que Albin haga lo que le guste, tampoco para asistir al colegio.
Después de años de usar un Baha, cambió su sistema de sonido por Osia, un dispositivo para las personas implantadas que presentan hipoacusia conductiva.
Cómo funciona el Sistema Osia
Los implantes acústicos se valen de la conducción ósea para sortear las fallas en el oído externo y/o el oído medio, para poder llevar así los sonidos hasta la cóclea.
Este sistema (implante y procesador de sonido) utiliza la vibración que producen los sonidos y la conduce a través del hueso hasta llegar al oído interno y transmitir el sonido.
El sistema Osia cuenta con dos partes: el procesador de sonido Cochlear Osia® 2 y el implante Cochlear Osia® OSI200
Los beneficios del Sistema Osia
¿Qué necesita un niño para estar bien? Muchas cosas, pero entre ellas está la amistad. “Es divertido estar juntos”, dice Albin de sus amigos de artes marciales. El procesador no le estorba para sus actividades. “No lo siento cuando estoy haciendo cosas divertidas”, asegura.
Tener el implante desde su primer año de vida le permitió a Albin desarrollar sin problemas el habla y el lenguaje, pero también la posibilidad de participar activamente en conversaciones y discusiones, así como prestar más atención a sus profesores en clase. “Eso me da más confianza”, asegura Albin.
Porque uno de los beneficios que perciben las personas implantadas es la confianza en sí mismas, al poder comprender mejor el mundo que los rodea.
Además, el sistema Osia permite:
- Una mejor recepción de las altas frecuencias
- Abordar una amplia gama de niveles de pérdida auditiva para ayudarlo a escuchar mejor.
- Mejorar la audición tanto en espacios ruidosos como en los entornos silenciosos.
Además, el procesador de sonido Osia está dotado con la tecnología SmartSound® iQ, que adapta automáticamente los sonidos según el entorno, es delgado, liviano y discreto. También es importante tener en cuenta que es compatible con cualquier dispositivo Apple® y puede conectarse con los dispositivos Android por medio del Phone Clip de Cochlear True Wireless™.
El sonido es mucho mejor y más claro con Osia
Eso es lo que dice Albin, que con el sistema Osia escucha mejor y más claro, que es uno de los objetivos que se tienen con cada actualización de las soluciones desarrolladas por Cochlear: lograr que las personas con hipoacusia escuchen mejor y puedan vivir su vida sin que la pérdida auditiva represente una limitante.
Tenga en cuenta
Pida consejo a su profesional de la salud acerca de los tratamientos para la hipoacusia. Los resultados pueden variar, y el profesional de la salud le indicará qué factores pueden afectar a sus resultados. Lea siempre las instrucciones de uso. No todos los productos están disponibles en todos los países. Si desea obtener información sobre los productos, póngase en contacto con el representante local de Cochlear.
Referencias
D1940599
