Se calcula que un 60 % de las personas mayores de 70 años pueden presentar una pérdida de la audición de 25 decibeles¹. La pérdida de audición relacionada con la edad es una realidad. El implante coclear puede ser una solución.
La pérdida de audición a causa de la edad es una realidad a la que se ven enfrentados los adultos mayores. El estudio Hipoacusia: trascendencia, incidencia y prevalencia, señala que esa disminución en la capacidad de escuchar se empieza a manifestar, incluso, desde los 50 años.
Ese proceso natural (y tratable, lo que no se debe perder de vista) se conoce como presbiacusia.
Una solución para esa pérdida en la capacidad de escuchar es, precisamente, el implante coclear, que puede ser recomendado por los especialistas en audición dependiendo, claro está, de una serie de pruebas que identifiquen el grado de hipoacusia presente y las características de cada persona.
Los adultos mayores pueden recibir un implante coclear, pero serán los especialistas en salud auditiva quienes determinarán, de acuerdo con las características de cada persona, la posibilidad de realizar la cirugía de implante coclear. Pero, la edad no es, en primer término, un impedimento para realizar el implante.
¿Qué es la presbiacusia?
Se trata de un fenómeno biológico que puede afectar a cualquier adulto mayor. Entre sus consecuencias está la reducción en ciertas actividades sociales, como el acto de conversar, lo que a su vez causa aislamiento, afectando el bienestar mental y la salud emocional de quienes la presentan y no la tratan.
Asumir la pérdida de la audición como una circunstancia más de la vida y, por eso mismo, no tratarla, es un error que no se debería cometer, en especial porque hay soluciones para recuperarla y no tener que padecer las consecuencias de no hacerlo.
Relación entre la edad, la contaminación auditiva y la pérdida de audición
Hay otras causas que tienen que ver con la pérdida de audición debido a la edad. Una de ellas es la exposición continua a ruidos fuertes.
Según la Organización Mundial de la Salud, el nivel más alto permisible de exposición al ruido en el lugar de trabajo (cuando se trata de trabajo operativo y con maquinaria) es de 85 decibeles (dB) durante un máximo de 8 horas al día².
La exposición constante o rutinaria a ruidos de mayor intensidad puede afectar, a largo plazo la salud auditiva de las personas jóvenes, incidiendo en mayores (o más tempranos) casos de pérdida auditiva.
Las poblaciones que están expuestas de manera permanente a ruidos fuertes (quienes viven cerca de autopistas o vías de alto tráfico, por ejemplo), también pueden ver resentida su salud auditiva.
¿Cómo saber si se está perdiendo el sentido de la escucha?
Hay varias señales de que usted (o algún conocido) puede estar perdiendo la audición. Estas son algunas de ellas:
- Tiene problemas para seguir una conversación.
- Se siente cansado o estresado por tener que concentrarse mientras escucha a alguien hablar.
- Pide frecuentemente a las personas que repitan lo que dicen.
- Piensa que otras personas murmuran o no hablan con claridad.
- A menudo malinterpreta lo que otros dicen y responde de manera inapropiada.
- Ve televisión y escucha música con un volumen más alto de lo que otras personas necesitan.
- Tiene dificultad para escuchar por teléfono o móvil.
- Escucha zumbidos, ruidos o silbidos en los oídos (conocidos como tinnitus).
- Puede tener otros síntomas como dolor de oído o una sensación de giro (vértigo).
Sin embargo, solo unas pruebas diagnósticas permitirán identificar si, efectivamente, ha perdido capacidad de escuchar y cuál es el grado de esa pérdida.
¿Por qué no esperar a que pase el tiempo con un problema auditivo?
Desatender la pérdida de la audición puede tener consecuencias en la salud mental y el bienestar de las personas. La hipoacusia sin tratamiento puede asociarse a lo que se denomina deterioro cognitivo, y también con la ansiedad y la depresión, según consta en el artículo Hipoacusia: trascendencia, incidencia y prevalencia³.
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Es por eso que, ante la sospecha de pérdida de la audición, es aconsejable consultar con un especialista en salud auditiva para confirmar si es necesario buscar una solución como el implante coclear.
Tenga en cuenta
La información en esta guía es solo para fines educativos y no tiene la intención de diagnosticar, prescribir tratamiento o reemplazar el consejo médico. Consulte a su médico o profesional de la salud sobre los tratamientos para la pérdida de la audición. Ellos podrán asesorar sobre una solución adecuada para su condición de pérdida auditiva. Todos los productos deben usarse solo según las indicaciones de su médico o profesional de la salud. No todos los productos están disponibles en todos los países. Por favor, póngase en contacto con su representante local de Cochlear™
Referencias:
¹ Age-related hearing loss: current research. En: https://journals.lww.com/co-otolaryngology/Abstract/2003/10000/Age_related_hearing_loss__current_research.10.aspx
² 1100 millones de personas corren el riesgo de sufrir pérdida de audición. En: https://www.who.int/mediacentre/news/releases/2015/ear-care/es/#:~:text=La%20OMS%20recomienda%20que%20el,de%208%20horas%20al%20d%C3%ADa.
³ https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0716864016301055
D1807606
