Usted no es el único con pérdida auditiva y puede tratarse

La pérdida auditiva es más común de lo que cree y puede encontrar diferentes soluciones para tratarla. Éstas son algunas creencias erróneas acerca de la hipoacusia.

¿Está sintiendo que su audición está disminuyendo a causa de la vejez? ¿Su hijo nació escuchando bien pero más adelante un medicamento le causó sordera? ¿Es  un adulto, entre 35 y 60 años de edad, y de pronto se dio cuenta que no oye igual?

La pérdida auditiva es más común de lo que cree y puede padecerla en cualquier momento de la vida por diferentes causas.

“El problema de la pérdida auditiva es que es algo que no se ve, que puede ser gradual y por ello es difícil de detectar. Pero una vez se hace, en cualquier edad, se puede tratar”, asegura Octavio del Moral médico audiólogo de Cochlear™. 

Por eso queremos aclararle algunas creencias alrededor de la hipoacusia o pérdida auditiva:

“La pérdida auditiva no es común”.

De acuerdo con las cifras más recientes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) “más del 5% de la población mundial (466 millones de personas) padece pérdida de audición discapacitante (432 millones de adultos y 34 millones de niños)”.

Se estima que al año 2050 más de 900 millones de personas —una de cada diez padecerá pérdida de audición—. Así que usted no es el único y, sí puede tratarse.

Las causas de la pérdida auditiva pueden ser naturales por motivo de envejecimiento, por una infección, por exposición al ruido o por genética, entre muchas otras razones. De hecho, los ruidos de las actividades industriales, el tráfico vehicular, las sirenas de emergencias, el uso de dispositivos electrónicos, entre otros hábitos de la vida moderna, pueden hacernos cada vez más vulnerables a adquirir problemas auditivos.

“La pérdida auditiva no tiene solución”.

De acuerdo al nivel y tipo de pérdida auditiva, puede encontrar varias alternativas de  tratamiento: audífonos (prótesis auditivas o auxiliares auditivos) e implantes cocleares o de conducción ósea.

Vale aclarar que estas soluciones auditivas aunque no curan la sordera, con el ajuste adecuado pueden permitirle oír, desarrollar el lenguaje y tener una mejor calidad de vida.

Si quiere estar mejor informado, le explicamos el ABC sobre la hipoacusia.

“Como la pérdida auditiva no es tan fuerte, no se va a notar. El audífono se ve mucho”.

La pérdida auditiva es inherente a la evolución y, en el caso de los adultos mayores, en efecto puede ser natural.

Según explica el Médico Audiólogo de Cochlear, Octavio del Moral, en ocasiones, por motivos de vanidad, distintos sectores de la población, incluyendo adultos mayores prefieren quedarse sin oír bien antes que buscar una ayuda auditiva.

“En el caso de los adultos, ellos prefieren no escuchar a que se les vea el dispositivo y que vean que no escuchan. Sin embargo se evidencia más la pérdida auditiva que un dispositivo auditivo”, afirma.

Cabe anotar que la última tecnología en implantes cocleares ofrece una amplia gama de modelos discretos y en colores que permiten un gran resultado estético, si es lo que le preocupa.

Por lo anterior tenga presente estas recomendaciones:

A) Lo principal es aceptar que tiene una pérdida auditiva. Si usted se da cuenta que tiene pérdida auditiva, su hijo, un familiar, un ser querido, o una persona de edad mayor a su cargo; no dude en acercarse a una unidad médica para tener una evaluación con un audiólogo, otólogo o fonoaudiólogo.

B) Solo un especialista podrá verificar si usted tiene pérdida auditiva e indicar una soluciónComprenda mejor leyendo sobre los niveles y tipos de la pérdida auditiva.

C) Existen diferentes pruebas para detectar la pérdida auditiva. Algunas requieren que el paciente coopere de manera activa y en otras, el paciente necesita cooperar, por ejemplo: no tener la edad suficiente para hacerlo adecuadamente (recién nacidos), tener alguna discapacidad o presentar cualquier otro problema que le evite interactuar activamente.

Algunas pruebas son:

A) Audiometría, que es la prueba estándar que permitirá detectar el umbral de sordera y el grado de pérdida auditiva. Y otras adicionales como logoaudiometría, timpanometría, reflejo estapedial, tamiz auditivo neonatal, emisiones otoacústicas, potenciales evocados auditivos.

B) Considerar que una pérdida auditiva, por lo general, es progresiva, es decir que puede empeorar. Por lo que es esencial ser diagnosticado para recibir un tratamiento oportuno y adecuado.

Si cree que está comenzando a tener pérdida auditiva, le contamos todo al respecto.

Tenga en cuenta

La información en esta guía es solo para fines educativos y no tiene la intención de diagnosticar, prescribir tratamiento o reemplazar el consejo médico. Consulte a su médico o profesional de la salud sobre los tratamientos para la pérdida de la audición. Ellos podrán asesorar sobre una solución adecuada para su condición de pérdida auditiva. Todos los productos deben usarse solo según las indicaciones de su médico o profesional de la salud. No todos los productos están disponibles en todos los países. Por favor, póngase en contacto con su representante local de Cochlear™